En post anteriores hablamos sobre la cesárea y su incidencia, por lo que deberemos hacer especial hincapié en sus cuidados para una correcta recuperación.
Para ello será necesario mantener reposo relativo durante los primeros días tras la cirugía, evitar coger peso y una correcta higiene, limpiándose la zona con agua y jabón, y secando con pequeños toques. También se podrá usar clorhexidina si tiene un aspecto un poco feo, que es similar a la povidona yodada y cuyo uso no está recomendado en este caso. No es necesario mantener tapada la cicatriz, salvo que el roce de la ropa pueda causar molestias.
La mayoría de las veces cicatriza sin problemas, pero en 5 de cada 100 personas hay complicaciones y aparecen queloides, que es el crecimiento anormal del tejido de cicatrización.
En caso de que presente calor, eritema, supuración o molestias en la zona, deberá acudir a la consulta de su médico para revisarlo y aplicar el tratamiento adecuado.
En cuanto a las acciones de Enfermería, deberemos diagnosticar la presencia de miedo o temor en la recién intervenida y apoyarle, además de ayudarle con sus cuidados para que tras la estancia hospitalaria pueda desarrollarlos sin problema en casa.
Aquí os dejo un vídeo dónde se explica de forma más extensa los cuidados de una cesárea por parte de una matrona:
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